Es una asociación fundada por Carlo Petrini en 1986, es un movimiento que tiene como premisa clara ser lo opuesto a la fast food. Según su estatuto, sus objetivos son:
a) otorgar dignidad cultural a las temáticas relacionadas con la comida y la alimentación;
b) individualizar los productos alimenticios y las modalidades de producción ligados a un territorio, en una óptica de salvaguardia de la biodiversidad, promoviendo su categorización y protección en tanto que bienes culturales;
c) elevar la cultura alimentaria de la ciudadanía y, en particular, de las generaciones más jóvenes, con el objetivo de lograr la plena conciencia del derecho al placer y al gusto;
d) promover la práctica de una calidad de vida distinta, basada en el respeto al ritmo y tiempo naturales, al ambiente y la salud de los consumidores, favoreciendo la fruición de aquellos que representen la máxima expresión cualitativa.
Es decir cocinar y comer como lo hacían nuestros abuelos. Cocina lenta, comida lenta con productos de nuestra tierra, de temporada o bien conservados con técnicas tradicionales y respetando la individualidad enogastronómica de cada territorio.
Yo creo que el problema en si no sería el McRoyal de Luxe, las patatas y la coca-cola (¿se pueden decir marcas?), del que confieso he comido en numerosas ocasiones, si no el estandard de vida que intentan introducir; el no parar para comer y eso, en las culturas mediterráneas no se concibe.
La comida es más que el acto de procurarte energía, es todo un ritual alrededor de una mesa con tu familia, amigos o cualquier persona, en el que se degustan recetas en las que se pone intención, ingredientes y tiempo. Actualmente la vida que llevamos se acopla al fast food de una forma demasiado rápida posiblemente sea el momento de frenar y redescubrir el slow food o bien ir a comer a casa de la abuela.
3 comentarios:
A mi me parece genial. Me encanta cocinar y comer y el ritual que ello conlleva.
Lo malo es que entre semana me resulta imposible.
Lo mio no es fast food, es super mega fast food, xq como en 4 minutos. Cronometrado!
La verdad que eso es una gaita, es otra ventaja de vivir en un pueblo que como las distancias son cortas te ahorras los desplazamientos y lo gastas en comer y ponerte como una...., por cierto teta sigue en pie lo de poner los "adelantos" en la dieta
Otra definición de Slow food, mejor en español, que después tenemos que votar para defender el idioma, "cojocomida". Dícese de la comida que tardas una tarde en decidir, una horita en comprar, tres en hacer y cuatro o cinco en saborear, comentar, digerir y homenajear. Es decir, comidas familiares de "merendero" con sobremesas interminables, sanísimas, sabrosísimas pero casi siempre excesivamente nutritivas.
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